Conocer
una ciudad como Londres es una tarea muy difícil y que nos llevaría
mucho tiempo. Es por eso que los viajeros que no disponemos de muchos
días para hacer una escapada buscamos siempre la lista de monumentos
y lugares que no deberíamos perdernos.
Casi
siempre se busca información en la red, en guías de viaje o en
recomendaciones de otros viajeros que ya tengan experiencia en el
conocimiento del lugar.
Tuvimos
la suerte de encontrar una iniciativa turística muy buena y útil
que ya conocíamos de Berlín y Praga. Esta iniciativa son unas
rutas guiadas andando por la ciudad y, en español.
La
visita a un lugar se disfruta al máximo cuando alguien conocedor te
cuenta historias llenas de anécdotas de los lugares y encima de una
forma amena. Busqué “Londres en español” para escoger qué
visita podíamos hacer el primer día.
Elegimos
“Londres clásico” y fue un acierto porque te da una perspectiva
general de la ciudad y luego, los otros días, puedes profundizar
buscando los lugares que más te han llamado la atención de lo que
te van contando y tú vas preguntando.
El
punto de reunión es en Piccadilly
Circus, en la puerta del Criterion Theatre, cerca de la fuente
(Metro: Piccadilly Circus). No hay necesidad de reservar. Simplemente
llegas al punto de encuentro. ( Precio 10 libras
)
Pasamos
tres horas muy entretenidas a pie de calle viendo los lugares
imprescindibles en tu primera visita a Londres y también sitios que
por nuestra cuenta no hubiéramos visto.
Si
decides ir a tu aire, un buen punto para empezar la visita a la
ciudad es la pequeña plaza Piccadilly Circus, la más famosa de la
ciudad, punto de encuentro de londinenses y turistas. El primer
impacto es la famosa pantalla luminosa que ocupa uno de sus lados,
así como por la fuente decorada con la estatua de un arquero alado
que hay en el centro.
A
partir de este punto se puede empezar a caminar por la calle Pall
Mall que está en el barrio más aristocrático de la ciudad, el de
St James. y ver las casas que albergan los clubs de caballeros.
También las famosas tiendas VIPS que proveen de artículos a la
familia real. ( La realeza no compra en Harrods )
Es
en este barrio donde está el Palacio de St James mandado construir
por el rey Henry VIII para Ana Bolena. Construido en estilo Tudor es
el palacio real más antiguo del Reino Unido y nos gustó mucho.
He
de decir que muchos viajeros pasan de largo buscando el Buckingham
Palace porque éste es el palacio habitado más grande del mundo, el
más conocido y el más turístico. Es también, la residencia de los
monarcas ingleses. Aunque el edificio principal y los jardines sólo
pueden visitarse en agosto y setiembre, el resto del año es posible
presenciar el cambio de guardia.
Delante
está uno de los parques más hermosos, St James Park, que es una
reserva natural en el corazón de la ciudad.
Muy
cerca está otro de los monumentos más visitados y que te deja con
la boca abierta, la Abadía de Westminster, en cuya verticalidad
gótica se corona a los monarcas ingleses. Si se quiere visitar por
dentro de manera gratuita, se debe asistir a la celebración de la
misa de 5.30.
Justo
detrás está el Palacio de Westminster, las Casas del Parlamento con
sus dos torres, la Torre Victoria y la Torre del Reloj (el famoso Big
Ben), que da la hora 0 del mundo. (Los ingleses dominan muchas cosas)
Un
breve paseo recorriendo Whitehall, la calle de los ministerios,
permite asomarse al inicio de Downing Street, en cuyo número 10
reside el Primer Ministro, pero las medidas de seguridad no permiten
el acceso.
Cerca
está la célebre plaza de Trafalgar Square con la National Gallery
que la preside. Es en esta plaza desde donde se miden todas las
distancias de la Gran Bretaña, su particular kilómetro cero, junto a
la estatua ecuestre de Carlos I.
Por
cierto … se puede acabar el tour tomando una cerveza negra en The
Ten Bells que es un pub que dicen fue fundado en 1752 y es famoso
porque fue habitado por el conocido Jack el Destripador y también
fue usado para rodar la película sobre el mismo personaje.
Si
se cierra el círculo y se vuelve a Piccadilly Circus una buena
opción es comer en cualquier restaurante del Soho.
En
este barrio las posibilidades son infinitas: tomar un te en la
cafetería del hotel Claridge's, visitar todo lo kitsch de Chinatown
o entrar en los almacenes Liberty, aunque sólo sea para disfrutar de
su edificio, sus vigas de madera y su carácter rústico con una
decoración e iluminación exquisita.
Para
finalizar lo imprescindible haced una incursión al British Museum
donde los amantes de las culturas antiguas quedarán extasiados.
Acabo
con una frase de Peter Ackroyd :
“ Londres va más allá de cualquier límite o convención. Es
infinita “
2 comentaris:
Aunque que Londres nunca ha estado entre mis rumbos en mente, lo cierto es que nunca se sabe….quizás algún día el destino me lleve hasta allí. B7s.
Preciosas fotos de Londres. ¡Me encantaron!
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